Trucos naturales para esta Navidad y Año Nuevo !!

Trucos naturales para no engordar en Navidad y año nuevo

Sin perder la cabeza

Ante todo, tenga presente que en las fiestas y celebraciones tendemos a perder la dimensión de las cosas: nos ponemos muy alegres, positivos y felices. Además, existe la terrible presión social de "come algo, no seas pesada", "en enero te pones a dieta", "por un poquito no te vas a engordar". Situaciones como las anteriores nos hacen olvidarnos del peso y caer en la tentación. Pero, ¿qué hacer entonces para no contrariar a los amigos sin perder la línea.

El secreto está en el equilibrio. Mantenga siempre la cabeza en su lugar: no se olvide que después de esas fiestas todo volverá a la normalidad y si usted abusa en diciembre, se arrepentirá en enero. Esto no quiere decir que usted tiene que encerrarse en su casa y pasar los días de fiestas a punta de pan y agua. Lo único que debe hacer es comer y tomar con moderación. Recuerde que muchas veces con un pedacito de dulce o tamal basta. Quítese el antojo, pero tenga medida.

De todo un poco

Ya usted tiene claro que este año no piensa perder la cintura por culpa de unos cuantos tamales. Con eso claro y la mente muy positiva, podrá disfrutar, con moderación, de todos los platillos y tradiciones de esta época.

Por ejemplo, si usted es la anfitriona, procure tener a la disposición de todos unas cuantas boquitas bajas en calorías como crudités verduritas crudas con un dip bajo en rasa preparado con yogur, culantro, cebolla y especias), quesos blancos o ensaladas. Puede tener también pancitos integrales, mostazas de diferentes tipos, carnes asadas (no embutidos) y vegetales. Eso le permitirá picar y comer en la fiesta sin correr el riesgo de aumentar de peso.

Mientras esté en casa, procure seguir una dieta balanceada, baja en grasas y calorías. De este modo, sólo comerá cosas pesadas cuando tenga una invitación y le sea verdaderamente imposible decir que no.

En esas fiestas y compromisos de fin de año, generalmente, sobran la comida y la bebida. Así que, antes de salir de casa, cómase algo liviano que le quite el apetito. Con esto llevará el estómago satisfecho y evitará comer cosas pesadas y grasosas sólo por antojo.

Una vez en la fiesta, procure no tomar licor. Tómese una soda con limón o una ginger ale. Un vodka con jugo de limón, un whisky con agua o dos copas de vino están permitidas... muy de vez en cuando.

A la hora de cenar, no rechace lo que le ofrecen; simplemente no se lo coma todo. En lugar de comerse todo, coma algunas cosas y en cantidades diminutas. Mastique muy despacio y tome suficiente agua.

Siga moviéndose Estos días de fiesta, parrandas y paseos a veces nos hacen olvidarnos de la rutina deportiva que, con tanta religiosidad, hemos mantenido durante todo el año. Ese es un error que usted no debe permitirse.

Ciertamente, muchos gimnasios cierran sus puertas, pero esa no es excusa para quedarse sentada frente al televisor con un plato de pastel en una mano y el control remoto en la otra. ¡Muévase! Aproveche el clima de diciembre y camine por las mañanas o al atardecer. Si va al centro comercial de compras, procure subir y bajar por las gradas. ¡Evite los ascensores y las escaleras eléctricas!

El secreto está en no permanecer inmóvil, mientras la grasita hace de las suyas. Camine, baile y queme esas calorías extra que vienen en la comida dicembrina.

Recuerde, además, que la Navidad y el año nuevo no son fiestas para atiborrase de comida. Estas son fechas para compartir y disfrutar con moderación y, sobre todo, reflexionar.

Nunca pase hambre. Si usted se priva de comida durante muchas horas su organismo se volverá perezoso. Eso quiere decir que el metabolismo irá más lento y cuando usted coma de nuevo no sólo comerá más sino que su cuerpo absorberá más y, por lo tanto, se engordará con más facilidad.

Coma sanamente. Coma frutas y verduras. Con esto mantendrá el estómago lleno y evitará esas atiborradas de última hora.

Evite tentaciones. Antes de ir a una fiesta, tómese algo caliente en casa. Una sopa, una ensalada, un pedazo de pollo hervido. Coma cualquier cosa liviana que la satisfaga y que le impida caer en la tentación de comer mucho donde sus anfitriones.

Dieta líquida. Si tiene una cena muy importante y sabe que inevitablemente va a comer, procure pasar el día con una dieta líquida. Tome jugos, sopas y cosas livianas.

Ejercítese. Por más que quiera evitarlo, no olvide hacer algún tipo de ejercicios. Si además de comer más, usted deja de lado su rutina física, engordará y perderá la línea. Así que ¡muévase!

Diferencie. Aprenda a distinguir el hambre de la ansiedad. Si es hambre, satisfágala con algo sano. Si es ansiedad lo que siente, contrólese. Hacer ejercicio es una buena forma de evitar los ataques de ansiedad.

Tome mucho líquido. (Especialmente agua). Tomar líquidos le hará sentir el estómago más Heno. Evite las sodas y las bebidas alcohólicas que le harán ganar de peso. Prefiera los jugos naturales, el jugo de limón y el agua pura.